MI REFLEXIÓN

Después de la introspección anterior
que me salió del alma, por algo que me pasó
quise estar en mi rinconcito nuevamente,
soy muy instrospectiva, no por orgullo, ni
vanidad, ni desconfianza, es mi forma de
ser, siempre he dicho que soy muy
profunda, medito mucho las cosas, y un
tiempo que estuve alejada de Dios, me
sucedieron muchas cosas malas, actúo sin
pensar, uso la cabeza y no la razón,
pero tengo la capacidad de darme cuenta
a tiempo de mi errores, y necesito a Dios,
necesito aferrarme, ser muy espiritual,
confiar en mi madre santa, en mis santos
en mis angelitos,soy muy sensible, y
son mis lienzos de oro que me afirman, que me
mantienen en mi lugar, en mi esencia
y saben como lucho para eso.
por esa misma razón, no permito en mi
la depresión, las pastillas, es enfermedad
de la mente, y no me puede ganar, si tengo
mucha fe y confianza en Dios, no puede ser
que llegue a ese sentimiento, que para mi
es debilidad, falta de fe; a todos nos suceden
cosas, y es por algo, y tengo que aceptar
lo que Diosito me mande, se perfectamente
porqué, cada uno sabe porqué.
Pero si alguien está viviendo esta situación
igual tiene todo mi apoyo, y mi amor.
Me gusta estar en mi rincón, no sobresalir
escuchar y callar, no hablar de mi, escribir
es diferente, me han sucedido hechos hermosos
que nunca los he contado, porque pienso
que són regalos, que pasaría por loca, que
los invento, entonces estan dentro de mi
y mi Dios lo sabe, por eso se de su perdón.
Hay personas que todo
lo cuentan, se hacen notar, y van diciendo
lo lindo que les pasa, las maravillas, las obras
que hacen, y tienen personalidad, y tienen el
don de la palabra, entonces son personas
de bien, todos las quieren, quieren cambiar a las personas, aconsejan, pero no se ponen en el lugar
real del que escucha, para mi cada individuo
es como es, su cambio es personal, solo el o ella
sabe lo que les tocó vivir, sus sufrimientos,
experiencias, lo demás es juzgar, es uno
si quiere un consejo o que la guíen, es buscar a un
sacerdote, quien mejor que ellos nos hagan ver la luz,
también se aprende a través de la Eucaristía, escuchar
con el corazón,cada palabra digerirla
increíble como se va introduciendo, limpiando
nuestro corazón.
Nosotros no podemos decir, especular,
asegurar, etiquetar a una persona,
solo nosotros sabemos como somos,
si mostramos caretas
si no somos como nos damos a conocer,
y por supuesto nuestro Dios, que conoce
realmente nuestras actitudes, hay que
aprender aceptar, a ser tolerante, no
mirar en menos, somos todos, TODOS, hijos
de Dios, sin distinción, de ningún tipo.
Que realmente, nuestro pesebre, que es
nacimiento, perdón, agradecimiento, vida
renazca para siempre en nuestro corazón
y no solamente ahora que se acerca navidad.