Sentí un deseo inmenso de escribir,de irme a la profunda, se que es mi rinconcito, que sólo a mi me interesa, y que mi ahijadito José sabe y a veces me hace algún comentario, y conoce a su tía fuera de lo común, no la típica dueña de casa que se encierra hacer aseo, almuerzo, y tantas cosas que por ser mujer tengo que hacer, sin esperar nada a cambio, no todos me conocen en general soy tranquila, reservada, muy tímida, que es lo menos que me gusta y trato de disimular un poco, para muchas personas a lo mejor pesada y creída, pero es por la misma timidez, más encima mi compañero de vida es como mi papá, su carácter es muy fuerte y posesivo, y siempre pensando que me pueda pasar algo, y yo super tranquila porque nunca tengo miedo, ando tranquila por la vida, sin pensar que me suceda algo, si así sucediera es porqué tenía que pasar, en cualquier lugar existe el peligro, pero se que tengo a mi angelito que me cuida y me quiere tal cual soy.A veces ni yo misma me conozco, cuando se me mete algo en la cabeza, no me doy ni cuenta cuando estoy cometiendo algún error, y hecha a perder todo mi ser, y mi postura de no hacer daño a nadie, y querer a todos,y me mancho, y me arrepiento, sí, me doy cuenta lo que está mal, gracias a Dios tengo ese don y recapacitar, para no volverlo hacer, igual es la fuerte educación que recibí, los valores quedaron, pero me cuesta mucho ir por un buen camino, y quiero, sé que quiero.Finalmente, quiero desahogarme y escribir lo sola que me siento a veces, cada uno con sus cosas y deberes, sin colocarse en el lugar de otros, la vida que a mi me tocó vivir es difícil, agotadora, igual me avergüenza decir que estoy cansada y no permito deprimirme, no eso no, igual soy alegre, y yo me doy ánimo, nadie más lo hace, ni lo reconoce, pero no importa, no es fácil levantarse cada mañana, y ver a mi angelito si está con sus ojitos abiertos, si su respiración continúa, es mi único miedo, y nunca voy a estar preparada para enfrentar ese momento, aunque siempre digo que se haga SU voluntad, pero el miedo igual está, es que lo quiero demaciado, y voy a misa seguido para sentir la fuerza y mandarle el calor de la luz del Espíritu Santo, a mi angelito que está allí en su camita, y cuando llego, sus ojitos brillan, así los veo yo, y también estoy en paz y contenta, por mi fuera todos los días, pero a veces no puedo, mi niño no puede quedar solito, y le doy mil gracias a mis tres padrecitos que los siento conmigo, y los quiero mucho, ellos trajeron el gran regalo de la Eucaristía, y me dan la fuerza para seguir adelante, y ver la vida de otra forma.Por si alguien le interesara y entre a mi rinconcito, un gran beso, y que pasen un lindo día, y haga una oración por mi, y por el mundo entero.